Los diferentes códigos bidireccionales

25.11.2012 21:38

 

Después de leer alguno de nuestros artículos, os preguntareis como es posible que un programa informático sea capaz de aplicar un gráfico, elemento o información en 3D sobre nuestra imagen o  entorno físico a tiempo real. O como es posible que mediante una simple imagen compuesta de bips, podamos gracias sistema móvil dirigirnos a un enlace, a un vídeo, pagar en algún restaurante o tienda, sacar información…

Bien pues en el caso de la aplicación de información, sobre un mapa, para conseguir obtener datos sobre puntos de interés turístico, zonas de recreación, restaurantes, bancos, tiendas, farmacias… Esto es posible gracias a la geolocalización, que es el posicionamiento de algún punto en concreto dentro del planeta usando para ellos las coordenadas (X,Y,Z) obtenidas por los diferentes satélites (estacionarios y orbitarios) que rodean nuestra Tierra. Esa información será procesada y expuesta al usuario a través de su dispositivo colocando en el punto correcto dentro de un mapa virtual, o en una imagen real tomada por la cámara integrada del dispositivo. Hay una gran variedad de apps y programas que nos permiten gozar de esta tecnología e información. Algunos de ellos son: Google maps, Google Earth, layar…

La posibilidad de dirigirse a una página web, pagar la cuenta de un restaurante, de una tienda… Aplicar un gráfico, dibujo… sobre nuestra  imagen real y muchas otras opciones, son posibles actualmente gracias a sensores, como los que usan algunos sistemas avanzados usados en las consolas de nueva generación como Play Station Move, Kinect entre otras, Códigos BiDi, códigos QR, Bokodes, Bidireccionales…

Para ser sincero los más expandidos y usados son los BiDi y los QR. Los códigos BiDi  y QR son muy parecidos la principal diferencia es que los BIDI son privados o código cerrado y para poder leerlos o abrirlos se necesita un programa en concreto que nos aportará nuestra compañía telefónica en este caso, por el contrario esto no ocurre con lo QR.

Los códigos QR, es un tipo de código de barras bidimensionales, que permite acumular de manera codificada una gran cantidad de información alfanumérica, a diferencia de otros códigos bidimensionales como los de barras.

Se caracterizan por su forma cuadrada y sus correspondientes cuadrados situados en las dos esquinas superiores y en la inferior izquierda (según lo miras)

La principal utilidad con la que se desarrollaron estos códigos fue para ser usados en la industria de la automoción. Actualmente tiene muchos y muy diversos enfoques (Publicidad Campañas de marketing, Merchandising)

Estos códigos son realmente sencillos de usar puesto que en internet encontramos algunos generadores de códigos, desde los cuales tan solo con introducir la URL de una dirección web conseguirás realizar un QR. Su lectura podrá ser realizada con móviles y otros aparatos portátiles. Para ello deberemos tener instalado un programa o lector de QR, como es el caso del neoreader que es el que yo tengo instalado en mi terminal móvil.

 

Otros tipos de códigos secundarios son los beetagg y los bokodes. Los primeros de ellos, son otro tipo de código bidireccional, en este caso no estándar y el más difundido para Mobile Tagging (Reconocimiento de códigos de 1 o 2 dimensiones desde un dispositivo móvil).

 

Sin os preguntaran sobre el significado de Beetagg, la mayoría de nosotros no tendríamos ni la mas remota idea, aunque ayudándonos de la anterior foto conseguimos hacernos una idea de cual podría ser. Su significado es” etiqueta de abeja”, y no es de extrañar ya que el código se forma sobre una retícula en forma de panal de abeja (Bee = Abeja en Inglés).

Por otro lado lo bokodes son un nuevo sistema de código de barras que consiste en un pequeño dispositivo leed y diversas lentes que consiguen de contener cientos de veces más información que cualquier código bidireccional, en tan sólo 3 milímetros que es lo que este nuevo invento ocupa.

Pueden ser leídos a una distancia de 4 metros con un terminal móvil.

Este nuevo sistema es capaz de albergar tal tamaño de información gracias a su de pequeños códigos datamatrix, los cuales no sólo contienen datos, sino que también informan sobre la posición relativa que ocupa cada uno de estos.

A pesar del gran aporte al trabase de información, estos códigos son aún algo caros para ser difundidos en masa pues cada unidad cuesta algo más de tres euros

 

Hecho por Alberto Pérez